Benjamín Ríos Merino

El 8 de marzo de 2022, Elena Letelier abandonó su Talca natal para iniciar una travesía que le tomó 2 años. Su inspiración fue conocer la vida de las mujeres alrededor del mundo y entender cómo el machismo ha afectado sus vidas. También buscaba comprender sus anhelos, motivaciones y frustraciones. Al rememorar su viaje, Elena experimenta sentimientos encontrados. Por un lado, esperanza de que ciertas situaciones pueden revertirse, pero desolación al pensar que el machismo continúa arraigado en las culturas.

La idea de realizar este viaje surgió para Elena Letelier tras su experiencia en El Camino de Santiago, donde experimentó una sensación de libertad nunca antes sentida. Sin embargo, su motivación principal fue su compromiso con la justicia social.

La idea era recopilar testimonios de mujeres que han estado aisladas, para conocer cómo el sexismo ha marcado sus vidas, entender cómo ha afectado su crecimiento, conocer sus anhelos y cómo encuentran felicidad en sus vidas.

Elena Letelier, periodista y escritora.

«La idea era recopilar testimonios de mujeres que han estado aisladas, para conocer cómo el sexismo ha marcado sus vidas, entender cómo ha afectado su crecimiento, conocer sus anhelos y cómo encuentran felicidad en sus vidas. Ser mujer no ha sido fácil, ni aquí ni en ninguna parte del mundo. Tenemos tanto en común que al conversar, sentía que éramos las mismas», comentó Elena Letelier, periodista y escritora.

ELENA LETELIER: UN LARGO CAMINO LEJOS DEL HOGAR

Manila, Sídney, Taipei, El Salvador, Serbia, Vietnam, España, Irak, Pekín y muchas otras ubicaciones formaron parte del recorrido de Elena Letelier. En ocasiones cruzó fronteras a pie, en otras ocasiones las decisiones de ruta fueron simplemente coincidencias.

Pero la libertad de la trotamundos se veía a menudo ensombrecida por la cruda realidad de las mujeres con las que hablaba. Elena documentó casos de abuso y maltrato extremo, a menudo perpetuados durante décadas. Aunque en algunos casos encontró historias de resistencia y revelación, en otros simplemente no hubo ninguna.

«Creo que queda mucho por hacer. Los cambios deben perdurar en el tiempo y arraigarse mediante la educación. Chile es un país que está rezagado; ha habido avances, pero aún queda mucho por hacer. Los cambios deben ser sostenibles, no meramente palabras que se las lleve el viento», comentó Elena Letelier.

Actualmente, Elena está trabajando en la escritura de un libro sobre su viaje y los testimonios recopilados. Este proceso implica una profunda reflexión mientras aprovecha el tiempo para reconectar con su familia en Chile, incluyendo a su hijo y su madre.

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