Laura Corbalán

Hablar de inclusión tiene profundidades que pueden tornarse insondables para las y los que no estamos en los zapatos de quienes a diario abordan sus vidas desde una discapacidad. La buena noticia, es que hay quienes avanzan en su desarrollo y entrega profesional percatándose de las necesidades que en esa línea presenta su entorno y, también, las y los estudiantes que pese a diversas condiciones, no piensan quedarse en el impedimento. Sobre esa base es que nace Ver Física en la Oscuridad,

Sobre esa base es que nace Ver Física en la Oscuridad, una iniciativa centrada en la generación de material didáctico que facilita el proceso de enseñanza y aprendizaje de asignaturas vinculadas a la física y las matemáticas en personas ciegas, que logró concretarse gracias a observación, conexión con la realidad y al trabajo diario que desarrolla Olga Penagos como académica de la Universidad de Tarapacá sede Iquique. Desde ahí pudo vivenciar las barreras que existen para estudiantes con ceguera y acudir a uno de ellos para hacerse cargo de esta situación con acciones concretas y probadas.

Mismos objetivos, mismas oportunidades

Y es que no se trata solamente de fabricar material técnico didáctico que apoye a estudiantes y académicos en el proceso de aprendizaje y acortar brechas: Ver Física en la Oscuridad se trata también de emparejar la cancha para que estudiantes ciegos y no ciegos puedan acceder desde un lugar común a los aprendizajes.

“De manera personal, no percibía las necesidades en el aula de clase frente a la situación de inclusión. Es difícil empatizar con problemas en los cuales no nos involucramos. Sin embargo, en las cátedras de física y matemáticas, nos vimos enfrentados al reto de cómo vincular al estudiante sin vista para que lograra los objetivos del curso, hace dos años atrás”, señala Olga Penagos, quien ha liderado junto a las académicas Jeannette Huerta, Silvia Padilla y Jeamise Herrera, este viaje que sienta un precedente en materias de inclusión  en la educación, generando ventajas tanto para estudiantes ciegos como para académicos que se enfrentan estudiantes con ceguera.

Un prototipo promisorio

Según la mirada de Penagos, el proyecto aún en fase de prototipo, va a ser la inspiración de más de un académico y la motivación para que más estudiantes ciegos se vinculen con el mundo profesional. Esto gracias a la creación de material técnico y didáctico como un libro que aborda temas relacionados con la física clásica, cinemática y dinámica de una partícula, con imágenes explicativas en alto relieve y letras en lenguaje braille de fácil comprensión. Además, cada libro va acompañado de un kit con material didáctico que mejora la experiencia de aprendizaje.

Sus múltiples aplicaciones y futuro impacto en las comunidades, han hecho que Ver Física en la Oscuridad se convirtiera en una de las iniciativas impulsadas por el Concurso de Proyectos para la Innovación en Educación Superior UTA Prototipa 2022, como una herramienta altamente útil en el acceso igualitario a la educación.

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Colaborar y generar un impacto desde la vivencia

Dado que las inquietudes que tuvo Olga Penagos previo diseño del proyecto,  surgieron en el aula de clases, el trabajo de Ver Física en la Oscuridad se realizó con la colaboración de Danny Torres, estudiante ciego de sexto año de Ingeniería Civil en Informática de la Universidad de Tarapacá, a través de quien se hizo patente la necesidad de reforzar la enseñanza y aprendizaje con material ad hoc.

“Muchas veces me tocó quedarme después de clases, mucho rato, o durante mis horas de almuerzo y las de la profesora, preguntando y aclarando dudas que me quedaron porque no sabía qué escribía y dibujaba en la pizarra. Si hubiese tenido desde un inicio este material, sería otra cosa”, declara Danny Torres al hacer un recorrido por estos tres años de trabajo junto a Penagos y su equipo.

De ese modo, tanto Olga, liderando al equipo de estudio y trabajo, como Danny que ha estado colaborando desde su vivencia, coinciden en que este material de aprendizaje daría buenos frutos en las salas de clases, permitiendo que las y los estudiantes perfeccionen lo que ya se ha avanzado a favor de ajustar y perfeccionar las herramientas con las que hoy están disminuyendo brechas en acceso inclusivo a la educación.